La directora de Planificación Estratégica del Ministerio del Ambiente y Desarrollo Sostenible (Mades), ofreció un panorama detallado de los avances y retos en el Chaco paraguayo en términos de sostenibilidad y protección ambiental.
Portillo en entrevista con Paraguay TV destacó que el Chaco, una de las regiones más emblemáticas de Paraguay, posee un gran potencial de desarrollo, pero siempre bajo un enfoque que sea amigable con el medioambiente.
“De hecho, que la gente que vive ahí, las colonias, o sea, las cooperativas que están trabajando ahí, mismos los otros productores, son unos productores que trabajan con un amplio margen de respeto al medioambiente”, agregó.
Este compromiso con el entorno natural se refleja en las acciones diarias de los habitantes del Chaco, quienes, a pesar de los desafíos que implica vivir en una zona de condiciones climáticas extremas, han logrado implementar prácticas agrícolas y ganaderas que minimizan el impacto sobre la biodiversidad local.
Portillo recordó una visita reciente junto al ministro del Ambiente para constatar el arduo trabajo que se realiza en el territorio: “Estuvimos con el ministro visitando ese grandioso trabajo que hacen de cuidar el medioambiente, y sobre todo de mejorar su entorno. No es fácil vivir en el Chaco, o sea, de manera que uno tiene que buscar la sostenibilidad, pero también respetándola. Al Chaco hay que sentirlo, vivirlo, y sobre todo con la evolución que tuvo de forma positiva el trabajo que están haciendo la gente que vive ahí”.
La directora también explicó que, a través de diversas iniciativas y programas, el MADES ha logrado transformar lo que anteriormente eran proyectos aislados en una Plataforma de Desarrollo Sostenible. Esta plataforma extiende su alcance a la región oriental de Paraguay, abarcando distintas actividades productivas, comunidades indígenas, y sectores del gobierno y la sociedad civil.
“Esa plataforma de desarrollo sostenible evolucionó, no quedó solo en un proyecto. Esa plataforma se institucionalizó, y es liderada por el Ministerio del Ambiente. Es un espacio de intercambio de buenas prácticas, de preocupaciones y de muchos temas, tanto del sector privado como del sector público. Está la sociedad civil, las comunidades indígenas, los grupos de jóvenes, entre otros”, señaló Portillo.
Este modelo participativo ha permitido que diversos actores puedan aportar a la construcción de una visión común sobre cómo debe abordarse la sostenibilidad en las prácticas agrícolas, ganaderas y otras actividades productivas.
Uno de los aspectos clave de esta plataforma es el hecho de que se basa en un proceso de diálogo y cooperación, donde los mismos participantes establecen las prioridades y objetivos de desarrollo. Portillo recalcó la importancia de incluir a las comunidades indígenas en este proceso, aprendiendo de sus conocimientos ancestrales sobre sostenibilidad.
Consolidación de buenas prácticas agrícolas y ganaderas. Según publicó IP, en su intervención, Portillo destacó la evolución positiva de las prácticas agrícolas y ganaderas en la región. En el caso del sector ganadero, que constituye uno de los principales commodities de Paraguay, la sostenibilidad ha sido un eje central. “El mismo presidente de la República, en el discurso que dio en la inauguración, reconoció que somos líderes en producción sostenible”, afirmó.
Los productores de la región han creado corredores biológicos que no solo ayudan a la protección de los cultivos frente a los vientos del Chaco, sino que también contribuyen a la preservación de la fauna local, como el emblemático jaguareté. Estos corredores permiten que especies de vida silvestre puedan desplazarse a través de la región sin poner en peligro su hábitat natural.
Portillo también enfatizó que el gobierno ha trabajado intensamente para fomentar la producción sostenible a través de políticas y programas de zonificación agrícola, que buscan una mejor distribución de las actividades productivas en la región, evitando la sobreexplotación de los suelos y promoviendo el uso adecuado de los recursos naturales.