El sector arrocero en Paraguay enfrenta importantes desafíos y una de las tareas pendientes es contar con una variedad nacional o varias que se ajusten a la realidad y a nuestras condiciones climáticas y oportunidades de áreas.
En ese sentido, Jonathan Giles, gerente de La Riviera S.A indicó a Valor Agrícola que, es fundamental la colaboración entre el sector privado y el gobierno para financiar y desarrollar materiales nacionales ya que conlleva todo un proceso de investigación y adaptación. “Paraguay necesita dar ese salto apuntando a una producción más eficiente y competitiva”, expresó.
También señaló que es fundamental trabajar en lo que respecta a las importaciones de semillas. “Actualmente, la mayoría de los productores utilizan sus propias semillas, hay pocos importadores, y la calidad de lo que se importa no siempre es la mejor. Este ha sido un problema persistente durante muchos años”, manifestó.
Destacó que, a través de la Cámara Paraguaya de Industriales de Arroz (CAPARROZ), y la Federación Paraguaya de Arroceros (FEPARROZ), se está trabajando para establecer vínculos significativos con referentes de Brasil, que permitirá realizar importaciones directas de semillas sin intermediarios.
Remarcó que todo este proceso no se limita a traer, sembrar y reproducir, sino que requiere un enfoque integral. Sin embargo, resaltó que el Servicio Nacional de Calidad y Sanidad Vegetal y de Semillas (Senave), ha mostrado por primera vez en mucho tiempo, una apertura significativa.
“En materia productiva creo firmemente que estamos en el camino correcto y soy optimista al respecto; sin embargo, aún estamos rezagados en cuanto a la disponibilidad de materiales” expresó.