Según las nuevas previsiones de la última Nota informativa de la FAO sobre la oferta y la demanda de cereales se prevé que la producción mundial de cereales de 2023 alcanzará el récord histórico de 2.836 millones de toneladas, lo que supone un aumento del 1,2 % respecto de 2022.
La producción mundial de cereales secundarios se cifra ahora en un máximo histórico de 1 523 millones de toneladas, tras el ajuste al alza de 12 millones de toneladas efectuado este mes. La mayor parte de la revisión obedece a los nuevos datos oficiales del Canadá, China (continental), los Estados Unidos de América y Türkiye, donde la combinación de un aumento de los rendimientos y unas superficies cosechadas mayores de lo previsto ha llevado a que se incrementaran las estimaciones sobre la producción de maíz.
Según las previsiones, la utilización mundial de cereales en 2023/24 asciende ahora a 2 822 millones de toneladas, lo que supone 8,9 millones de toneladas más que lo comunicado en el pronóstico de diciembre, cifra que supera en un 1,2 % el nivel de 2022/23, gracias a un uso como pienso mayor de lo que se había estimado antes, especialmente en la Unión Europea, así como en Australia y los Estados Unidos de América.
En consecuencia, las previsiones sitúan al coeficiente reservas-utilización de cereales a escala mundial en un nivel holgado del 31,1 %, con lo que superaría el nivel del 30,9 % correspondiente a 2022/23.
En la actualidad, se prevé que el comercio mundial de cereales en 2023/24 alcance los 480 millones de toneladas, es decir, un 0,8 % más que el año precedente, debido sobre todo a la comercialización de mayores volúmenes prevista para los cereales secundarios, mientras que el comercio mundial de trigo y arroz efectivamente podría contraerse.