El gerente general y vicepresidente del directorio del banco GNB Paraguay, Osvaldo Serafini, conversó con Valor Agro sobre cómo la entidad bancaria se perfila como un aliado clave del sector agropecuario. Además, destacó el grado de inversión alcanzado en Paraguay, resultado de reformas económicas y leyes a lo largo de los años, y subrayó la importancia de presentar al país de manera positiva en el escenario internacional para atraer inversiones.
Comentó que el ADN del banco incorpora el concepto de apoyo al sector productivo, manteniendo siempre abierta una puerta para toda la cadena agropecuaria. Indicó que alrededor del 35% de su portafolio está concentrado en este sector. “Esto se debe a que estamos cerca del cliente, conocemos sus necesidades y buscamos la mejor manera de apoyarlos”, afirmó.
Al analizar el primer tramo del año, marcado por una sequía que ha afectado al sector agropecuario, señaló que estas situaciones son recurrentes en los negocios de commodities, que siempre están expuestos a factores como la logística, los precios internacionales, los costos de producción y la variabilidad en la oferta que impacta el stock mundial. Añadió que buscan entender la coyuntura de cada ciclo y permanecer cercanos a los clientes para brindarles apoyo.
“El Banco Central del Paraguay, ya tiene experiencia en manejar situaciones de este tipo, ya que la economía del país depende en gran medida del sector agropecuario. Debido a esa experiencia, se implementan medidas transitorias de manera proactiva que permiten asistir mejor a los productores en momentos críticos, ya sea en términos de productividad, precios o flujos de pagos”, detalló Serafini.
En cuanto a la economía general, resaltó la importancia del grado de inversión alcanzado e indicó que es fruto de un trabajo sostenido en Paraguay, que no se limita al último año ni al último período, sino que se remonta a reformas como la Ley Fiscal y Tributaria de 1991, la Ley de Bancos de 1995-1996 y la nueva Ley de Bancos de 2020.
“Es la consecuencia de todo ese ordenamiento jurídico que proporciona el marco operativo y asegura el manejo ordenado de las finanzas públicas y la estabilidad macroeconómica”, agregó.
Así también precisó que el grado de inversión de Paraguay está bajo los reflectores y que el mundo lo observa. Por lo tanto, se debe hacer el mejor esfuerzo y ofrecer una actuación impecable bajo esas luces para transmitir confianza, fortalecer el marco jurídico y atraer inversiones. Algunas llegarán de inmediato, otras a mediano plazo y otras representarán promesas de futuro.
Sobre la morosidad, indicó que se mantiene controlada, en un nivel regular dentro del promedio del sistema. En términos de solvencia, señaló que Paraguay se destaca en la región por sus sólidos ratios de solvencia en el sistema financiero, lo que demuestra que hay oportunidades para seguir creciendo y aumentando el crédito hacia los sectores productivos.
En materia de innovación, mencionó que el GNB siempre está atento a lo que ocurre en otras geografías, subrayando que no es necesario reinventar la rueda, sino observar qué soluciones se adaptan al mercado local y satisfacen las necesidades de los clientes. “Al final del día, el usuario es quien debe juzgar la funcionalidad de las herramientas que ponemos a su disposición”, comentó.
Al referirse a las perspectivas para el cierre de 2024, destacó el crecimiento económico de Paraguay en comparación con otros países de la región, lo cual siempre impulsa el desarrollo. “Los bancos son un reflejo de la economía. Si la economía crece un 3 o 4%, el crédito crece tres veces más, apoyando este crecimiento y el nivel de inversiones, lo que es muy positivo”, concluyó