Actualmente, los productores enfrentan una serie de desafíos significativos, especialmente relacionados con la sequía, los precios bajos y los costos de producción.

En ese sentido, el ministro de Agricultura y Ganadería, Carlos Giménez indicó a Valor Agrícola que, la campaña 24/25 se presenta como un reto significativo, especialmente con previsiones de lluvia poco alentadoras y precios que siguen siendo inciertos por lo que considera fundamental cuidar todos los aspectos para seguir ocupando lugares importantes en el nivel mundial como un país exportador.

“Este año se presenta como un gran desafío, pero tanto los productores como el gobierno están plenamente comprometidos y dispuestos a brindar todo el apoyo necesario para enfrentar los obstáculos que se presenten. Es crucial considerar ciertos aspectos fundamentales que nos permitan mantener nuestra competitividad, a pesar de los desafíos que enfrentamos”, expresó.

Giménez manifestó que, lamentablemente, los precios y las previsiones de lluvia no son alentadores, y que el sector está enfrentando la realidad de un sector que está atravesando dificultades. “Aunque los precios están muy influenciados por el stock mundial y no están en nuestras manos, sí podemos controlar otros factores que aumenten nuestra productividad”, remarcó.

En ese sentido dijo que diversificar es una alternativa muy válida en este contexto. Dado que enfrentamos una realidad con diferencias significativas en los costos finales de venta, “es importante considerar opciones alternativas”.

“Estamos trabajando para apoyar a muchos productores en el proceso de explorar y confiar en otros rubros que puedan proporcionar ingresos más estables. Debemos pensar porque con una actividad de cultivo que no garantice una buena cosecha, resulta difícil obtener un precio atractivo, los precios no son favorables y los costos de producción se mantienen altos.”, subrayó.

Con respecto al norte del país, una de las regiones más afectadas por la sequía, alegó que se está realizando un seguimiento cercano de la situación. “Conocemos la realidad de los productores en esa región. La cosecha ha sido muy dura, y el régimen de lluvias atípicas ha impactado significativamente en la producción, resultando en una baja productividad que afecta a toda la cadena”, remarcó.

“Somos conscientes de que enfrentaremos una diferencia significativa en los precios de los granos”, concluyó.