El vicepresidente de la Asociación de Productores Agropecuarios para un Chaco Sustentable (APACS), Marcos Kain, indicó a Valor Agrícola, que no están encontrando los techos de producción deseables para que el maíz se convierta en un negocio rentable en el chaco.
Cuando el margen de producción del maíz es negativo, se vuelve difícil comercializar los granos para convertirlos en kilos de carne, ya que la falta de rentabilidad hace inviable esta conversión. En estos casos, es necesario buscar soluciones para mejorar la rentabilidad o explorar otras oportunidades de comercialización, explicó Marcos Kain en una entrevista con Valor Agrícola.
Señaló que, agronómicamente se necesita del maíz en un sistema de rotación de cultivos, “pero cuando miramos la parte financiera y económica, con los valores que se estaban comercializando, se ha convertido en un negocio con margen negativo que tiene como consecuencia la disminución del área de siembra del cultivo”. La competencia en el mercado del maíz puede intensificarse cuando los precios son bajos, lo que dificulta aún más la capacidad de los productores para obtener buenos precios por sus productos.
De acuerdo al último reporte de Comercio Exterior de la Cámara Paraguaya de Exportadores y Comercializadores de Cereales y Oleaginosas (CAPECO), de enero a noviembre Paraguay exportó 3.2 millones de toneladas de maíz, es decir, 596.000 toneladas menos que el mismo periodo de la zafra anterior, que registró un record de producción. La menor cotización internacional del cereal repercutió negativamente en el ingreso de divisas (USD 656 millones en el 2023 vs USD 918 millones en 2022).
Si bien, el Chaco paraguayo ha experimentado un importante crecimiento en la superficie de producción agrícola en los últimos años, Kain considera que, para explorar el techo de producción de maíz en el país, es necesario tener en cuenta varios aspectos, principalmente la necesidad de trabajar en variedades mejor adaptadas a la región chaqueña que puede ayudar a maximizar el rendimiento de los cultivos y reducir las pérdidas por enfermedades y plagas.
De acuerdo al informe de intención de siembra que elaboró la Asociación de Productores Agropecuarios para un Chaco Sustentable (APACS), el área de siembra del cultivo de maíz se contraería un 10,47% al pasar de 64.276 hectáreas a 57.53 hectáreas para la campaña 2023 / 2024.