Los informes de algunas de las compañías de maquinaria agrícola más importantes confirman que las ventas caen en el mundo.
El mercado internacional se ha retraído y los stocks acumulados tardan en ser absorbidos por los mercados, según un informe del portal especializado Maquinac.
John Deere, AGCO, CNH Industrial y Kuhn reportaron bajas en las operaciones para la primera parte de 2024 con descensos de entre 12% y 20% en la facturación.
El ciclo comercial descendente se explica, en parte, por los menores ingresos agrícolas que se están alineando con los promedios históricos después de los óptimos números del período 2021/2023.
También inciden los altos costos financieros, conspirando contra la toma de créditos por parte de los productores.
La debilidad de la demanda se extiende a la mayoría de los segmentos de equipos y llega a una media de 10% para los tractores en los principales mercados.
En cosechadoras, las caídas más notorias de ventas se verifican en Sudamérica y Europa, al tiempo que son más moderadas en Estados Unidos. Incluso, en el mercado estadounidense, la comercialización de cosechadoras repuntó en abril.
Se estima que, en Brasil, la mayor potencia agrícola de la región, el mercado de maquinaria agrícola se contrajo 20% en 2023 a pesar de la expansión agropecuaria en varios rubros, informó la agencia Bloomberg. Fue la primera caída anual desde 2016 y la más fuerte en una década según la asociación del sector, Abimaq.
Por un lado, los precios más bajos de las materias primas en el segundo semestre del año pasado frenaron las ventas. Pero también las expectativas de menores costos financieros en el futuro cercano retrasaron las inversiones en un país con tasas de 11,75% a fines del año pasado, que han bajado a 10,5% y se espera que lleguen al 9% a lo largo de 2024.
En India las ventas de tractores en el primer cuatrimestre de 2024 fueron las más bajas de los últimos cinco años, aunque no se descarta una recuperación para el segundo semestre.
El mercado mundial de maquinaria agrícola mueve algo más de U$S 160.000 millones por año y está cada vez más concentrado en las grandes multinacionales del sector.