Arrancó la cuarta semana del año y los precios de la soja anotaron ganancias de hasta US$3,86 por tonelada. Hubo datos positivos vinculados a importaciones de China y un repunte en los futuros de aceite, asociados a la recuperación del petróleo, que explicaron las mejoras de la jornada, explicó el responsable de Research de la corredora Zeni, Eugenio Irazuegui.
El mercado sigue bajo presión por las favorables perspectivas para la producción en la Argentina, donde ahora se abre un segmento de al menos una semana sin nuevas lluvias, mientras que se prolonga la incertidumbre sobre la suerte de la cosecha en Brasil, con estimaciones que siguen arriba de los 150 millones de toneladas y otras que caen hasta los 135 millones, indican desde la consultora Granar.
Al igual que la soja, el maíz se cotiza con ligeras oscilaciones en Chicago, luego de completar el viernes pasado la sexta semana bajista consecutiva.
Del lado de los factores bajistas se sostienen la presión de la oferta estadounidense récord y las buenas perspectivas para la campaña en la Argentina.
En tanto que las chances de repuntes se circunscriben a la chance de que se reduzca la superficie destinada a la zafriña en Brasil, donde la relación entre los costos y los precios recibidos por los productores se mantienen en terreno negativo.