La condición de las cosechas de maíz de segunda cosecha de Paraná en la temporada 2023/24 empeoró «significativamente» la semana pasada debido al clima seco que afectó a uno de los mayores productores del cereal en Brasil, informó el Departamento de Economía Rural (Deral) de brasil, en su boletín semanal.
Los cultivos en malas condiciones representan actualmente el 8% de la superficie, frente a sólo el 2% la semana pasada, señaló el Departamento Estatal de Agricultura.
Asimismo, el índice de cultivos en buen estado cayó al 72%, versus el 81% de la semana anterior. Los que se encuentran en condiciones normales representan ahora el 20%, frente al 17% anterior.
«La cosecha ha empeorado significativamente en los últimos 15 días debido a la falta de lluvia combinada con el intenso calor en el campo», dijo a Reuters el especialista de Deral, Edmar Gervásio.
Hasta finales de marzo, Deral estimó la segunda cosecha de maíz de Paraná en 14,2 millones de toneladas, prácticamente estable en la comparación anual. Pero el empeoramiento de las condiciones de los cultivos podría cambiar las cifras.
Según Gervásio, las lluvias de esta semana «siguen siendo irregulares y no han podido estabilizar las pérdidas».
«La expectativa es que, si llueve en los próximos días, tengamos al menos una estabilización de las pérdidas», afirmó.
Un frente frío avanza por el sur de Brasil entre el miércoles y el jueves. Paraná tiende a recibir lluvias a partir del jueves, con el avance del nuevo sistema, según el boletín de este martes de Clima Rural, que apunta a que las inestabilidades ganarán intensidad durante el fin de semana.
Gran parte del maíz de segunda cosecha de Paraná se encuentra en fases que requieren lluvias, como fructificación (26%) y floración (31%). Sólo el 1% se encuentra en maduración y el resto en desarrollo vegetativo (42%).
Deral también informó que la primera cosecha de maíz y soja está próxima a finalizar. En el caso de las oleaginosas, los productores ya cosecharon el 97% de las áreas.