GPSA llevó a cabo su jornada de campo de maíz en la Unidad de Producción Agrícola Paso Kurusú, en el departamento de San Pedro. El objetivo fue mostrar los trabajos que realizan en el establecimiento con aplicación de alta tecnología e innovaciones para una mejor producción. El día de campo se realizó el 20 de abril pasado.

En las diferentes estaciones estuvieron presentes representantes de cada una de las empresas aliadas a GPSA: Surcos; BASF; Gama Technologies, con la línea para la nutrición vegetal; y la tecnología en híbridos de maíz NK, de Syngenta. Presentaron las novedades en productos fitosanitarios para el cuidado y manejo del cultivo. El evento estuvo dirigido a agricultores de la zona. Participaron directivos y funcionarios de GPSA, autoridades locales, técnicos, entre otros.

La jornada se enfocó en todo lo que es tecnología e innovación para maíz. El ingeniero agrónomo Fabián Pereira, director comercial de GPSA, manifestó su satisfacción por la calidad del maíz, ya que la zafriña fue acompañada de muy buenas lluvias que beneficiaron y permitieron su buen desarrollo. Destacó que los granos tendrán la posibilidad de ser bien comercializados, y de esa forma pagar los platos rotos que dejó la última campaña de soja, que tuvo niveles de producción muy bajos. “Esto demuestra, una vez más, que el productor tiene el potencial y la capacidad de recuperarse cada 120 o 130 días, donde cada ciclo comienza y termina cada campaña”, dijo.

La Unidad de Producción Agrícola de Paso Kurusú tiene una superficie total de 20.000 hectáreas. El principal cultivo es la soja, con 19 mil hectáreas. Estas se encuentran totalmente monitoreadas en cada fase del desarrollo del cultivo por un equipo de trabajo que dispone de herramientas que permiten obtener datos que luego se cargan en un software informático y se trasmite la información a un satélite. De esa forma se puede tomar medidas inmediatas en cada caso.

El segundo cultivo importante del establecimiento es el maíz zafriña. Este año se alcanzó una superficie de 11.000 hectáreas. “Sembramos lo máximo que se puede, todo lo que permite la ventana de siembra, como para evitar riesgos de heladas”, agregó.

Actualmente, en el resto de las áreas de producción cuentan con una superficie importante de trigo y cultivos para cobertura. Con esto, para la próxima campaña productiva de soja esperan entrar con parcelas más limpias y con buena cobertura, lo que va a contribuir para lograr un mejor rendimiento.

Durante la jornada, GPSA enfatizó sobre el trabajo de los técnicos involucrados en el monitoreo. “Queremos que los productores sean participes del desarrollo de GPSA, que últimamente viene creciendo en niveles importantes y a pasos agigantados, en comparación al crecimiento de las empresas de la región”, dijo Pereira.

Altas expectativas para el maíz zafriña

El departamento de San Pedro es una zona importante de producción de maíz. El director comercial de GPSA recordó que el año pasado no tuvieron los niveles de lluvia de esta campaña, pero los rendimientos estuvieron cerca de los 5.000 kilogramos por hectárea.  “Esto nos motiva mucho para esperar rendimientos muy superiores a lo que fue la campaña anterior. Además, que, por la falta importante de granos de maíz a nivel mundial, va contribuir a generar una renta para pagar los platos rotos de la última campaña, que fue algo histórico y dejó un precedente sumamente grave en la mayoría de los productores”, remarcó.

Unidad Paso Kurusú, producción agrícola con impacto social

En la unidad Paso Kurusú, GPSA distribuye la superficie para la producción agrícola a seis productores. GPSA se encarga de proveer el manejo, control, monitoreo, asistencia técnica, seguridad, información y compra de granos.

Fuera de la unidad, en los alrededores, GPSA trabaja en un proceso para que la gente comience a subirse al barco de la producción, con la siembra de cultivos de soja y maíz, explicó Fabián Pereira. “La idea es que todos los productores se den cuenta de que existe un país diferente y productivo que le puede llevar adelante, sin tener que estar esperando la ayuda constante del Gobierno. Como compañía de producción, la idea es aglutinar a los agricultores y que puedan ir acompañando el desarrollo. Para ello, nosotros tenemos todas las herramientas tecnológicas para contribuir a todo ese gran desarrollo”, expresó.

En cuanto a la comercialización de granos. Resaltó que el proyecto incluye la instalación de un silo en el centro de San Pedro, en la localidad de Yaguareté Forest. Se trata de una unidad de acopio, con una capacidad de 40 mil toneladas. “Con esto no solamente vamos a poder alimentar la unidad de acopio con toda la producción de la unidad de Paso Kurusú, sino también con la producción de los agricultores que no tienen donde entregar, que van a encontrar una alternativa de comercialización de su producción”, destacó.