Las exportaciones de soja en estado natural y sus derivados industriales, hasta marzo de este año, llegó a 1,36 millones de toneladas. Esto representan una reducción del 28%, en comparación con el volumen enviado en el mismo periodo de 2021.
La caída es incluso más significativa, un 39% menos, si se compara con la cantidad promedio exportada en el primer trimestre de los últimos tres años.
En su informe, la Cámara Paraguaya de Procesadores de Oleaginosas y Cereales (Cappro) destaca que durante los próximos meses se espera que esta tendencia a la baja se vaya profundizando.
Al complejo panorama, generado en la producción de la materia prima, se debe sumar la situación desfavorable que viene afrontando la agroindustria, con la disminución consecutiva de la molienda en los últimos tres años, en sus condiciones de competitividad, constantes problemas logísticos en el transporte terrestre y fluvial.
Cappro remarcó que para afrontar la situación tan negativa, es muy importante el trabajo entre el sector publico y privado, para generar las mejores condiciones, que permitan mitigar, en la medida de lo posible, la gran pérdida que generará en la economía nacional la fuerte caída en la cosecha de soja.