El volumen de ventas al extranjero de aceite, harina, cascarilla y granos de soja acumulado hasta el mes de agosto llegó a 8,75 millones de toneladas, un crecimiento del 39% con relación al mismo periodo del año pasado y se mantiene como el mayor registro histórico no solo para este periodo del año.
Este desempeño se explica con el nivel récord de exportación de soja en estado natural, que tiene como principal destino las fábricas argentinas, que aprovechan tanto la disponibilidad más temprana de nuestra soja como sus muy buenas condiciones de calidad, en particular en lo relacionado a la proteína.
Por otra parte, la venta de productos agroindustriales hacia el extranjero muestra números relativamente favorables, aunque en un porcentaje bastante inferior (20% más que al mismo periodo del año pasado). Sin embargo, estos números se irán reduciendo conforme avanza el año, ya que, como se había comentado, la molienda para lo que queda del año será exigua debido a la falta de disponibilidad de materia prima, según señala el reporte de la Cámara Paraguaya de Procesadores de Oleaginosas y Cereales (Cappro).
Al cierre del mes de agosto, si sumamos las exportaciones de soja al volumen procesado en las industrias nacionales podemos encontrar que casi el 90% de la producción estimada para esta campaña de soja ya alcanzó uno de sus dos principales destinos, por lo cual, considerando la poca disponibilidad, es de esperar que la tendencia de bajo agregado de valor se profundicé este año.