Si bien aún pueden realizarse ajustes con la finalización de la cosecha, hasta el momento se espera que la producción de maíz paraguayo sea de 3,64 millones de toneladas para la zafriña 2024.

La analista senior de inteligencia de mercado de StoneX, Larissa Barboza señaló a Valor Agrícola que, la mayoría de los departamentos sufrió nuevos cortes, dadas las mermas registradas por condiciones climáticas adversas que acortaron el ciclo productivo, y, consecuentemente, adelantaron la cosecha, que se encuentra en aproximadamente 90%, cerca de ser finalizada.

“En principio se esperaba que la mejor campaña departamental fuese la de Itapúa, con 6.000 kg/ha, pero hubo un pequeño recorte y quedó en 5.900 kg/ha. Si bien, la merma de 1,7%, no es significativa, pero de cualquier forma ya es un corte”, señaló.

Sostuvo que hubo una heterogeneidad entre toda la región oriental, ya que en Itapúa fueron casi 6.000 kg/ha entre Concepción y San Pedro no se llegaron a los 4.000 kg/ha.  “Es una diferencia bastante amplia y específicamente en San Pedro, que una vez más fue afectado por la falta de lluvias, vemos que de las un poco más de 4.000 kg/ha que aún esperábamos en el mes pasado, este mes sufrió un nuevo corte quedando la productividad por hectárea en 3.200 kg/ha”, detalló.

En ese sentido dijo es una merma considerable y un golpe fuerte que consecuentemente hace que se espere más de un 50% de producción para la próxima campaña, ya que, en sus mejores años, San Pedro pudo llegar a cosechar más de 5.000 kg/ha por hectárea.

Los departamentos con menores bajas fueron San Pedro, Concepción y Amambay, que conjuntamente representaron 15% de la zafriña.

Alto Paraná lideró la producción, siendo responsable por 41% del total. Sin embargo, la productividad por hectárea no fue óptima, quedando el rendimiento por detrás de departamentos como Itapúa y Caazapá, que consiguieron 5.900 kilos por hectárea, por delante de las 5.5000 kg/ha de la zona altoparanaense.

Actualmente, se registra una comercialización de 43% del cereal, el nivel más bajo de los cuatro últimos años. Uno de los principales factores fue la disminución de los precios tanto a nivel internacional como regional, lo que generó la ralentización en las negociaciones. Un detalle importante en este sentido es que, aproximadamente, el 49% del maíz quedará para consumo interno, siendo el saldo lo exportable.