La semana pasada se registró un nuevo aumento en los precios de los fertilizantes. Alcanzaron máximos históricos, debido a la guerra entre Rusia y Ucrania, y marcaron nuevos récords. Rusia, el principal exportador, disminuyó los suministros.

“La guerra entre Rusia y Ucrania se intensificó, sembrando más caos donde se deberían plantarse cultivos y trastornando los mercados energéticos, de transporte, agrícola y financiero. Los precios del amoniaco en el Báltico subieron casi 400 $ por tonelada en una sola semana para unirse a la urea y la potasa en nuevos récords”, indicó la semana pasada el informe de la consultora británica CRU.

Ayer, en una nueva publicación, la consultora destacó un nuevo récord. El índice de precios se elevó a cerca de 30% y superó el máximo del año 2008.

Los principales proveedores de este insumo clave son Rusia y Bielorrusia. El conflicto perturba las exportaciones y los precios. En el aumento de precios también inciden el incremento de los precios del gas natural, utilizados para la fabricación de fertilizantes nitrogenados.

Los incrementos importantes en los valores de los fertilizantes se dan en un escenario complejo para la agricultura sudamericana. En Paraguay los productores inician el periodo de cultivos de invierno y se preparan para enfrentar la próxima la campaña productiva 2022/23. Existe preocupación en el sector y hay una especial atención en los precios de los fertilizantes, por ser un insumo clave para la producción de las materias primas.