De acuerdo a las últimas estimaciones del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA), se está proyectando un aumento significativo en la producción de soja tanto en el norte de Estados Unidos como en América del Sur.

Este incremento en la producción llevaría a un exceso de oferta en el mercado, el cual estaría aumentando en 6,4% respecto a lo que fue la zafra 2023/2024. Aunque la demanda o el consumo de soja también están aumentando, no lo hacen en la misma proporción que la oferta. Esto estaría generando un stock que podría alcanzar niveles récord, superando los 120 millones de toneladas, según explicó el consultor de riesgos de Stone X, Carlos Sanabria, en una entrevista con Valor Agrícola.

Este escenario sugiere que habrá una abundancia de soja en el mercado global, lo cual podría influir en los precios y en las estrategias de comercialización tanto para productores como para comerciantes de este cultivo, destacó.

Entendiendo el panorama desde la perspectiva de oferta y demanda, si las proyecciones del Departamento de Agricultura de Estados Unidos se cumplen y se confirma un exceso de stocks de soja, tendríamos que tener un ajuste de precios. “El crecimiento continuo de la producción de soja en Brasil, con un aumento anual significativo en el área cultivada, tiene implicaciones directas en los «basis» o descuentos que reciben los productores en puertos. Esto se debe a que un aumento en la oferta regional puede llevar a una competencia más intensa entre los productores por los mismos canales de comercialización, afectando los precios”, puntualizó.

“Si la tendencia de un exceso de oferta de soja continúa, es probable que se mantenga la presión bajista sobre los precios. Además, en el contexto regional donde hay un exceso de oferta significativo, es probable que los basis o descuentos que enfrentan los productores en los puertos también se mantengan elevados.”, subrayó.
Recordó que, en los últimos dos años, este castigo en el basis ha sido notablemente alto en comparación con la media histórica, lo cual complica la rentabilidad de los agricultores y afecta sus decisiones de comercialización.