El mes de diciembre es un periodo crucial para los productores, tanto en términos de producción como para la toma de decisiones sobre qué sembrar en el segundo ciclo. Además de las condiciones climáticas, la evolución de los precios juega un papel fundamental, ya que puede influir directamente en las elecciones de los productores para la próxima cosecha, determinando qué cultivos serán más rentables y adecuados según las circunstancias del mercado.
Según indicó a Valor Agrícola la analista senior de inteligencia de mercado de StoneX, Larissa Barboza, en las primeras semanas de enero, se espera obtener una evaluación más precisa sobre el impacto de las lluvias recientes, que han llegado en “un momento clave” para salvar y mejorar algunos cultivos.
Indicó que además de dar seguimiento a cómo esta variabilidad climática afectará la cosecha en Paraguay, es importante seguir de cerca el desarrollo de la zafra en Brasil. “Las lluvias en el centro y sur de Brasil son fundamentales, ya que la región concentra una parte significativa de la siembra. Estas precipitaciones pueden tener efectos directos en los precios internacionales de la soja y el maíz, con una posible presión a la baja si la cosecha brasileña alcanza niveles cercanos a su máximo potencial”, explicó.
Añadió que desde el Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA), se anticipa que la producción agrícola superará la demanda, lo que podría generar una sobreoferta en los mercados internacionales y combinado con una zafra brasileña favorable, podría generar una baja en los precios.
Además, mencionó que se mantiene la incertidumbre sobre la futura política de biocombustibles de Estados Unidos. Señaló que, actualmente, existe un marco de incentivos para la producción de biocombustibles a base de aceite de soja y maíz, vigente hasta 2027. Sin embargo, se espera que en 2025 se tomen decisiones clave sobre la renovación o modificación de esta política.
“En un contexto de cambio de gobierno en Estados Unidos y opiniones divergentes sobre el rumbo de esta política, el mercado podría experimentar presiones adicionales, especialmente en el aceite de soja, cuya dinámica de precios puede verse influenciada por cualquier ajuste en la política energética estadounidense”, alegó.