El asesor agroambiental de la Unión de Gremios de la Producción (UGP), Alfredo Molinas, compartió un blog denominado “Clasificación de medidas, prácticas de uso y manejo racional de los recursos naturales productivos del Sector Agro-rural”, con el cual resume las prácticas forestales que acompañan el desarrollo sostenible de la producción agropecuaria del país.

En este espacio se resalta que Paraguay está consolidado en distintas prácticas agroforestales que buscan aumentar la productividad de las fincas de forma sostenible, y que permiten sintetizar en el reciclaje de nutrientes, controlar la erosión hídrica y proveer a los productores madera, postes y leña.

“Al ser aplicados y bien manejados pueden consolidar y aumentar la productividad de establecimientos agropecuarios y plantaciones forestales de diversas dimensiones o, mínimamente, evitar que haya una degradación del suelo o merma de la capacidad productiva a través de los años”, explica Medina.

Es de resaltar que dentro del sistema agroforestal hay prácticas como la combinación de árboles con cultivos. Es decir, se plantan árboles en forma dispersa o intercalados en las chacras o áreas de cultivo para reciclar nutrientes, proteger el suelo, abonos verdes y ofrecer sombra.

Se explica además que también suelen ser utilizados para producción de madera u otras especies de uso múltiples, así como también, se aplica la práctica de árboles con cultivos en callejones que mezcla filas de árboles de porte pequeño o robusto con cultivos anuales para generar abonos verdes y aportar beneficios adicionales al control las malezas, evitar la erosión por el impacto de las gotas de lluvia y escorrentía sobre la superficie del suelo, también producir estacas y postes en las fincas.

Protección natural. Otro dato explicado por Medina es que también se plantan “cercos vivos” para la delimitación y protección de terrenos, y como cortinas rompevientos que ayudan a reducir la erosión eólica y la evapotranspiración excesiva de los cultivos y mejorando el rendimiento de los animales que pastorean en zonas de mucho viento.

A esto se suma que también se platan barreras en contorno con el uso de árboles y arbustos, en combinación con otras prácticas de conservación como terrazas para la recuperación y estabilización de suelos en terrenos con pendientes fuertes, o la protección de cauces y fuentes de aguas en las fincas.