Un total de 482.729 hectáreas fue la superficie alcanzada en lo que respecta a siembra de soja zafriña, lo que equivale a unas 23.393 más que el año pasado, cifras que reflejan un buen comportamiento del rubro y crecimiento sostenido en los últimos años.

Según el último boletín informativo de la Unión de Gremios de la Producción (UGP), los departamentos con más áreas destinadas a este cultivo fueron Alto Paraná (33%); Itapúa (25%); Canindeyú (17%); Caaguazú (9%) y Caazapá (7%), esto de acuerdo a la estimación de superficie del Instituto de Biotecnología Agrícola (Inbio).

En contrapartida, la superficie de siembra del maíz zafriña, alcanzó 987.859 hectáreas, siendo esta cifra una caída de 38.732 hectáreas en comparación al 2022 que fue un
año récord para el rubro.

Sin embargo, está por arriba del año 2021, cuando la superficie alcanzó las 918.641 hectáreas. Los departamentos con más hectáreas fueron Canindeyú (26%); Alto Paraná (24%); San Pedro (14%); Caaguazú (12 %) e Itapúa (10%).

Buen desarrollo. El clima contribuyó para lograr rindes de buena calidad y, gracias a los resultados positivos, los productores pudieron cubrir sus gastos de producción, pagar sus deudas y destinar un porcentaje de ingresos en inversiones para la nueva cam
paña agrícola.

Si bien muchos campesinos no plantaron en temporada de zafriña debido a la incertidumbre climática y de mercado, hoy existe más confianza para sembrar soja y maíz en esta campaña 2023/2024.