Lo que parecía ser un comienzo de año difícil para la producción agrícola en la zona de Canindeyú a falta de lluvias en diversas zonas, se está consiguiendo buenos rindes tanto en soja como en maíz tras la culminación de la cosecha.

En conversación con Valor Agro, el integrante de la Regional Canindeyú, Celito Cobalchini, afirmó que considerando los precios de la producción “es un año bueno” y que la cosecha viene avanzando hacia su etapa final con un promedio entre los 2.700 y  2.800 kilos por hectárea.

Así también, explicó que recientemente se empezó a sembrar soja y maíz zafriña en la región, y que de momento viene avanzando favorablemente, pero que todo dependerá de que el clima acompañe y que no venga una helada tempranera.

“De momento, el desarrollo de las plantas viene muy bien, ya que cuando se sembró vino una lluvia que optimizó ese avance, ahora dependemos que no venga un frío tempranero que afecte tanto a la soja como al maíz”. precisó el productor.

Sobre el punto, indicó que las lluvias no están siendo generalizadas en la región y que todo sigue igual como cuando empezó el año, en donde se tuvo muy poca presencia de agua en algunas áreas productivas, pero así también, en otras zonas se registraron precipitaciones por varios días seguidos.

Acotó que la zafra de soja ya está culminada y ha dejado resultados muy razonables, sin embargo, no lo considera como una “súper zafra” a raíz de que hubo partes en donde la cosecha mostró buenos rindes, a diferencia de otras que no tanto debido a los efectos de la sequía.

En lo que respecta a la economía de los productores, Cobalchini explicó que a raíz del quebranto de la campaña anterior, todavía quedan secuelas financieras y que por lo tanto, la mayoría no llegará a cubrir las deudas de la zafra anterior con la cosecha de este año.

Sin embargo, afirmó que los resultados que está dejando esta campaña son muy diferentes a la anterior y que está representando un respiro para los productores.