Avanzar hacia tecnologías más resistentes en la agricultura se ha convertido en un factor clave para enfrentar los desafíos actuales. En la campaña agrícola actual se ha ido presentando distintos escenarios debido a las condiciones climáticas generando rendimientos dispares en distintos puntos del país y sigue avanzando “con muchas irregularidades”.

En ese sentido, para asegurar una buena productividad, incluso en situaciones climáticas desfavorables es importante utilizar herramientas y variedades que sean resistentes a diferentes tipos de estrés biótico y abiótico, según indicó a Valor Agrícola Estela Ojeda, gerente general del Instituto de Tecnología Agraria (INBIO).

En ese sentido, sostuvo que se continúa con los trabajos dentro del Programa de Mejoramiento en Soja partiendo siempre de la base de que cada región y situación específica pueden requerir enfoques y herramientas diferente. “Sabemos que existe mucha variabilidad con el clima y también de las propias plagas y enfermedades porque todo está relacionado con el ambiente, entonces lo que estamos buscando es ofrecer al productor herramientas, con lo que a lo mejor no puede solucionar todos sus problemas, pero le permitirá manejar mejor las circunstancias”.

Señaló que, en la última salida de campo, donde presentaron los avances del programa, compartieron las principales novedades que se tendrá con la tecnología HB4. Lo fundamental es que este material permite tolerar mejor la falta de agua, lo que la hace más resistente a la sequía. “Además, junto con eso se le está dando una nueva herramienta para el manejo de malezas, que es la tolerancia al glufosinato de amonio, esto le da mejor amplitud al productor para ir manejando sus problemas”.

Así también, por otro lado, se busca llegar a variedades que puedan enfrentar mejor a la roya. “Sabemos que la roya es un patógeno que causa una disminución en el rendimiento de los cultivos generando grandes problemas económicos para el productor.”

Indicó que dentro de las líneas avanzadas con genes apilados de resistencia Roya no solo se habla de una tecnología desde el punto de resistencia y productividad, sino también de un material amigable con el ambiente. “El productor va a estar usando menos fungicida y es muy interesante también hablando en materia económica. Estamos buscando herramientas para que el productor tenga opciones de acuerdo a sus condiciones”, apuntó.

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